Eran las reinas de la ciudad, y en Zaragoza, donde últimamente más abundaban, era donde más seguras se sentían. Siempre las miraban a ellas y sabían que era a ellas a quien más adoraban. Eran las señoras de la tercera juventud. Ellas, Las Obras, sabían que ellos, Los Ancianos, siempre estarían contemplándolas y por ello, la mayoría de las veces, iban tan lentas… Y es que la realidad no era que fueran lentas, es que sabían que una vez terminaran siendo aquello por lo que las habían construido ya no se sentirían tan importantes. Daba igual si se convertían en un Palacio, una obra arquitectonica o en El Pilar... ya no serían lo mismo para aquellos que más amaban. Sus adorados ancianos ya no las contemplarían con la admiración que ahora lo hacían. Había sido así desde el principio de los tiempos y ellas pensaron que siempre sería así y que nada se interpondría en su hermosa relación… Se equivocaron…
De repente, en un momento dado, llego a la ciudad algo que asusto a Las Obras más jóvenes “Tiene mala pinta todo esto” “Parecen muy atractivos para ellos”. Pero las más veteranas las consolaban diciendo que no se preocuparan, que siempre habían sido ellas, por muchos intrusos que llegaran… Aún así, decidieron que era mejor averiguar algo más de sus nuevos enemigos.
“¡Son periódicos gratuitos!”- explico aquella que más se enteraba de todo –“salen por la mañana y se regalan a todo aquel que lo quiera… Y no es que solo haya de una clase, ¡es que hay varios periódicos gratuitos!”
La noticia no fue muy bien acogida por ellas, una cosa era tener contrincantes como la petanca o el parchís… no les importaba compartirlos por las tardes, pero las mañanas… ¡las mañanas eran de ellas!
“Relajaros muchachas” –dijo una de las veteranas –“Segurísimo esto es una fase, dejémoslo un tiempo y volverán a nosotras”
Sin embargo, poco a poco, Los Periódicos fueron ganando la batalla. Ya no era que sus adorados abuelos cogieran uno de cada clase, no… estaban tan hipnotizados con semejante prodigio de la naturaleza que cogían dos y tres ejemplares de un mismo periódico…
Las Obras, en un último intento de conquistar los corazones de sus adorados ancianos, consiguieron atraer la Expo a Zaragoza y así miles y miles de obras llegaron a la ciudad dispuestas como ninguna a luchar, en una batalla épica, contra sus odiados Periódicos.
¿Quién salio victorioso? Aún estamos en plena guerra... y lo que parece es que aún tendremos guerra para rato...
Historia dedicada a Alvaro Guiu, fue él quien me la inspiro. Tq guapisímo.
12 comentarios:
jajajjaj excelente, buenísimo :D
Has contado lo que tantas veces tengo en mente, pero nunca se me hubiera ocurrido una forma tan ingeniosa y divertida de contarlo.
Yo ya llegué a pensar que los arquitectos deberíamos tener muy en cuenta al preparar los planos, que existe una nutrida concurrencia de jubilados que hay que atender a pie de obra ¡faltaría más! jajaj
Creo que la lucha la ganarán las obras, sin duda. Tienen más vidilla que los periódicos y hasta puedes llegar a comentar la jugada con algún obrero ;)
Llegado el caso, un buen sudoku y algunas fotos de actualidad en la pared de la caseta de obra puede ayudar...
besos
(lo que me he reído... aisss)
jajajajaj... Claro que sí, tenéis que pensar en ellos... estan hechas para ellos... jajajajaja... Yo también creo que ganaran ellas pq me da que por mucho que pase el tiempo siempre siempre siempre hay una obra en un lugar del camino preparadica para el deleite de nuestros ancianos... aunque, por otro lado, si vieras la de gente mayorcica que se aglomeran a la espera de su periódico diario aquí en Zaragoza por las mañanas...
Besicos y buen finde!
No hay nada que hacer: las obras son invencibles.
Pero qué original y qué inspirado; y qué bien relatado. Es que sucede tal como lo has descrito. ¡Anda!, que no hay afición por coger el periódico gratuito al punto de mañana. Y es que como son gratis..., a los abuelos eso les va, bueno casí debería haber escrito, nos va :)
De todas formas ahora se llevan la palma las obras de la Expo. ¿Ya has estrenado la pasarela?
Un besico
¿Seguro Pedro? Mira que hasta ahora si eran las reinas pero los periódicos estan compitiendo muy bien...
Nada de nos va Julio, les va... :-)
Aún no he visto nada, a parte de las obras, de la Expo... ¿Tú has visto algo?.
Besicos!
Bueno..., la ribera del Ebro está quedando, a mi parecer, preciosa. Date un paseo por la margen izquierda, desde el puente de la Almozara hasta la pasarela y luego cruzas el rio por ésta; te gustará.
Un beso
jajajajaja !!!!!!!
Genial tienes toda la razon ganaran las obras ya que despues de coger el periodico hacen su rutinario paseo por ellas (claro esta despues de pelearse por coger el periodico)para luego comemtar como va cada obra,asi que..... ¡¡¡ Vivan las Obras !!!!
Un besazo precisa
la reina de la noche
Si, la verdad es que Las Obras tienen el beneplacito de nuestro público... (jamás he sabido exactemente que significa beneplacito... pero me daba que quedaba bien... jajajajajaj....)
Besicos!
jajajaaj! Me parto, qué imaginación! jajaja.
La verdad es que tiene su gracia lo de las obras encantadas de que los ancianos las miren! jajaja
Los periódicos lo tienen dificilillo. Pero hay que luchar hasta el final. ¿Para cuándo la batalla definitiva?
Un abrazo
Que no se pongan celosorras, que están tan atractivísimas y recoquetonas como siempre, que quitan el hipo con solo ver el dulce remenear de una buena hormigonera
Los periódicos gratuitos esos solo son la pelandrusca de poco más o menos que nunca las desplazará a ellas, las verdaderas "Geisas" de la edad patriarcal
Soloyo fijate ahora en ellas que pinchas y coquetas se ponen cuando nuestros abuelos las observan... jajajaajajaj....
Pablo lo tienen dificil pq luchan con unas veteranas pero no creas que no estan armando jaleo ¿eh? que tienes a los abuelos anonadados... La batalla final... uf... tiemplo pensar en ella...
Celebrador: Claro que son las reinas pero es que las pequeñas pelandruscas estan armando jaleo ¿eh?.
Besicos!
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